Miguel Ángel, Marie Claude, Enrique, Blanca de las nieves y Jorge Gª-Dihinx, en la cima del Gourgs Blancs
Picos Jean Arlaud (3.048m) y Gourgs Blancs (3.128m), Valle de Estós
Sábado 6 agosto 2011
Miguel Angel Campos, Enrique Lardiés, Marie-Claude Tourillon, Blanca de las Nieves y Jorge Gª-Dihinx
El fin de semana comienza ya temprano el viernes por la mañana. Blanca y yo salimos de Zarautz y, tras parada en Zaragoza a cambiar material de playa por el de montaña, salimos de nuevo hacia el Valle de Benasque. Por su parte, Marie Claude acude desde Biescas. Nos juntamos en Campo y seguimos los tres hasta Eriste. Dejaremos un coche en el parking de la Espigantosa (Angel Orús) para posible regreso circular el domingo.
Cenamos unas pizzas en Benasque mientras esperamos a Miguel Angel, que sale más tarde desde Huesca y a Enrique, que acudirá desde Vic y que viene aún con la “sangre espesa” (como diría Iñaki Ochoa de Olza) tras conquistar recientemente el Pico Lenin (7.136m). Enhorabuena!
Por fin nos reunimos los 5 mosqueteros esa noche en Benasque y subimos todos al parking de Estós. Da gusto dormir en las furgonetas de Miguel Angel y Enrique, sendos hotelitos con ruedas… Gracias!
El sábado amanecemos a las 6 AM. Tenemos un largo día por delante. El desnivel a salvar al Jean Arlaud desde el coche supera los 1.800m, con lo que debemos ir lo más ligeros posibles. Además han anunciado algunas tormentas por la tarde, así que no podemos ir demasiado lentos. Como decía Lachenal, en montaña, la rapidez es sinónimo de seguridad.
Comentamos el ir o no con cuerda, arnés, casco y demás. Nuestro amigo catalán Xavi D. me comentaba días antes que es una cresta sencilla al J A y al Gourgs Blancs, que en su día hizo sin cuerda sin mayores problemas. Miguel Ángel por su parte ha guiado a varios grupos en esta cresta hasta en 4 ocasiones. Se la conoce al dedillo y nos invita a dejar el casco y demás peso en el coche.
Subimos tranquilamente por el valle de Estós, llegando cómodamente al refugio, donde dejaremos algo de peso. Desde allí, la ruta se endurece y salvamos fuerte desnivel en poco tiempo, hasta llegar al Puerto de Ôo (2.877m). Allí empezará la escalada propiamente dicha. Hemos elegido la cara Este del Jean Arlaud, limpia y elegante, sin piedra suelta, en vez de la canal descompuesta que hay como ruta normal subiendo a la brecha entre el Gourgs Blancs y el Jean Arlaud.
Llevamos la reseña del libro de Mikel Capdevilla “Los tresmiles en 30 jornadas”, que describe esta zona de la siguiente manera: “Del Puero de Ôo nos dirigimos por entre grandes bloques hacia la base de la gran pared que constituye la cara Este del J A. Trepamos primero a una larga repisa que se extiende a lo largo de la pared, por la que nos desplazamos a la derecha en busca de unas fisuras llenas de hierba que nos ayudarán a superar esta gran placa inclinada mediante trepada fácil”.
Allí que nos vamos. Un par de cordadas que han salido esta mañana desde el refugio de Estós están ya en la cima y no ofrecen peligro de tirarnos piedras. La trepada discurre por zona limpia y buena roca, muy segura. Miguel Ángel va liderando. Le sigo y me sitúo entre el grupo y él, para poder ir sacando fotos a todos, arriba y abajo. La trepada es sencilla y de las de disfrutar, aunque en las fotos la impresión es de mucho patio. Buenos agarres por todos lados y roca firme. Según las guías, no pasa de III inf.
La roca es tan buena, que me puedo permitir el lujo de soltar las manos y sacar continuamente la cámara para fotografiar a mis compañeros.
El ir sin cuerda es aceptable en esta pared, lo que confiere rapidez a la progresión. Por supuesto, llevarla está del todo recomendado y puede ser más prudente, especialmente si la altura asusta. Ahora bien, la progresión es así más lenta y se recomienda entonces salir temprano desde el mismo refugio de Estós.
Tras este breve tramo de bonita trepada, la progresión se suaviza y se hace más sencilla, tras otra sencilla trepada llegamos todos cómodamente a la cima de Jean Arlaud (3.048m). Yupiii!
Desde allí, el destrepe hacia la brecha con el Gourgs Blancs es entretenido. Tras bajar un poco, nos salimos momentáneamente por el norte, al lado francés, para volver luego a la brecha y contornear por el sur un espolón que sobresale en la misma brecha. Allí hace pasos de bailarina Marie Claude. Desde la brecha, la subida al Gourgs Blancs es sencilla (I). Y van dos cimas seguidas! Bieen!
Seguimos por la cresta rumbo al siguiente tresmil, la Torre Armengaud (3.123m). Pero las nubes oscuras que vienen del oeste no le gustan un pelo a Miguel Angel. Las lluvias no se esperan hasta después de las 5 de la tarde o así y son las 2:15 PM en ese momento.
Miguel Ángel no quiere meterse en una tormenta con aparato eléctrico en plena arista. Así que opta por la prudencia y nos recomienda una sensata retirada, escapando desde mitad de cresta por la cara sur del pico.
Vamos buscando mojones y vemos algún cintajo abandonado. Miguel Angel va investigando los pasos más sencillos y nos va guiando a los novatos en algún que otro destrepe. Blanca de las nieves y yo le vamos siguiendo como buenos alumnos. Marie Claude continúa con sus pasos de bailarina mientras Enrique, que anda como Pedro por su casa, cierra el grupo desde arriba.
Tras entretenidos destrepes por fin llegamos a terreno suave y paramos a comer.
Luego volvemos a parar en el lago de Gías e iniciamos el descenso final al Ref de Estós, donde llegamos a las 17:30 horas.
Al final ni llovió ni nada. Incluso estuvimos al solecito por la tarde secando la ropa...
Al día siguiente queremos subir al Posets por la Coma de la Paúl y, si el tiempo se porta, seguir la cresta al Espadas para volver por el Angel Orús.
Podremos?? La meteo pinta batante gris aunque prácticamente seca... Veremos lo que ocurre... en el próximo post.
De nuevo, muchas gracias Miguel Ángel por traernos a esta bella cresta que ninguno conocíamos.
Habrá más, seguro.
Jorge
Mapa Alpina 1:25.000 con el recorrido
Listos por la mañana para salir, en el parking de Estós
Algunos tramos de la aproximación a Estós son realmente bellos
Con el refugio de Estós al fondo
Paradita en el ref de Estós para dejar algo de peso
Enrique, Marie Claude, Blanca y Miguel Angel. Ninguno posa y cada uno tiene su postura particular
Ya aparecen nuestros próximos destinos. Marcada la ruta de subida y la de nuestra escapatoria
Acercándonos al Puerto de Ôo, con la cara Este del Jean Arlaud a la vista, por la que treparemos
Blanca alterna las repisas herbosas con fisuras amplias donde entran bien pies y manos
Miguel Ángel liderando. La roca ofrece múltiples agarres para pies y manos
La roca es tan buena, que me puedo permitir el lujo de soltar las manos y sacar continuamente la cámara para fotografiar a mis compañeros. Blanca de las nieves y Marie Claude disfrutan de la trepada
Impresiona la verticalidad en la foto, aunque era menor. Marie Claude casi parece que va andando
Salvada la primera tapia, viene una zona de descanso. Al fondo el Seil de la Baque
Impresionante panorama hacia el Seil de la Baque y el Perdiguero, Miguel Angel
Blanca y Marie Claude en una segunda sección entretenida, pero no difícil
En cada cima, Enrique Lardiés nos iba leyendo, con "acento francés", la reseña de la cresta que venía después. Qué estilo tienes Enrique!
En la cima del Jean Arlaud: Enrique, Blanca de las nieves, Marie Claude, Miguel Angel y yo
Tras superar el Jean Arlaud, tenemos en frente la mole del Gourgs Blancs, aunque primero habrá que bajar a la brecha entre ambos picos
Entretenido también fue el rodeo a este espolón que hay en la brecha entre ambos picos
Blanca de las nieves, andando los últimos metros a la cima del Gourgs Blancs (3.128m). Bravo campeona!
Miguel Angel y Blanca, en el momento en que las nubes le hicieron a éste primero decidir retirarnos por una vía de escape en la cara sur
Vamos destrepando a los lados de una canal que vemos que desciende
Miguel Ángel espera en el paso clave para ofrecernos su pierna como apoyo en ese punto. Blanca, Marie Claude y yo lo agradecimos. A Enrique ni le hizo falta. Si es que donde hay nivel...
Miguel Ángel, siempre antento al resto, guiando a Marie Claude que viene por arriba
Blanquita, en primer plano, observa la progresión de Miguel Ángel abajo, mientras arriba Marie Claude busca cómo destrepar. Enrique parece que esté apoyado en la barra de un bar, como si tal cosa...
Los pasos de bailarina de Marie Claude son siempre muy divertidos
Por fin llegamos a un sitio tranquilo donde parar a comer. De momento no llueve. Bien...
Blanca negocia la llegada al nevero en la base de la roca. Pero dónde hemos dejado los esquís!!!
Y ya estamos de vuelta en el refugio de Estós...
Mañana otras nuevas aventuras por este valle tan hermoso. Qué ocurrirá??
Nos vemos en el próximo post.
Para ver el resto de las fotos, podéis pinchar aquí






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